Evangelio según Mateo 10, 17 – 22

Fiesta de San Esteban, primer mártir

 

Dijo Jesús a sus Apóstoles: Cuídense de los hombres, porque los entregarán a los tribunales y los azotarán en sus sinagogas. A causa de mí, serán llevados ante gobernadores y reyes, para dar testimonio delante de ellos y de los paganos. Cuando los entreguen, no se preocupen de cómo van a hablar o qué van a decir: lo que deban decir se les dará a conocer en ese momento, porque no serán ustedes los que hablarán, sino que el Espíritu de su Padre hablará en ustedes. El hermano entregará a su hermano para que sea condenado a muerte, y el padre a su hijo; los hijos se rebelarán contra sus padres y los harán morir. Ustedes serán odiados por todos a causa de mi Nombre, pero aquel que persevere hasta el fin se salvará.

 

Meditación de Sebastián Castaño Fueyo

 

“No serán ustedes los que hablarán, sino que el Espíritu de su Padre hablará en ustedes”

 

Jesús parece decirnos: sepan que las respuestas las encontrarán en Dios. Perseveren y tengan esperanza, porque el Santo Espíritu de mi Padre estará con ustedes en toda circunstancia. Día a día busquen ser guiados por el Espíritu Santo, porque así descubrirán los caminos que conducen a una vida coherente y plena, en darse en el amor a Dios y a sus hermanos. Así serán testimonio del amor de Dios. Eviten dudar, porque se sentirán desamparados, tengan paciencia y humildad, hagan silencio y escuchen a su Padre que les habla en la oración.

 

Creo que este Evangelio me invita a reconocer que Dios se da completamente a nosotros para que yo me dé a otros. El necesita de nuestras manos y nosotros de su compañía. No puedo aislarme, o dudar, de la presencia de Dios en mi vida, esa es una tentación que debo evitar con más oración. Jesús nos invita a ser perseverantes y a confiar plenamente en su mano que nos guía y nos conduce a la plenitud. En este tiempo de Navidad me propongo ser fiel y buscar los caminos de Jesús.

 

Querido Señor, gracias porque siendo todopoderoso te hiciste pequeño y frágil para habitar entre nosotros. En esta Navidad concédeme ser fiel a Dios Padre en toda circunstancia, tanto en las alegrías, como en tiempos de dificultad. Quisiera en esta Navidad, que como familia sepamos atesorar el regalo de tu presencia en nuestras vidas y que nunca dudemos de que Tú quieres estar siempre con nosotros.  Ven Espíritu Santo y llena los corazones de tus fieles para que actuemos conforme a tu voluntad. AMÉN